Áreas prioritarias

Apoyar a los movimientos feministas, de derechos de las mujeres y por la justicia de género para que sean una fuerza impulsora de retos a los sistemas de opresión y para la creación conjunta de realidades feministas.

Fortalecimiento de Movimientos

Contenido relacionado

¿Qué es AWID?

La Asociación para los Derechos de las Mujeres y el Desarrollo (AWID) es una organización internacional feminista de membresía.

Trabajamos para alcanzar la justicia de género y los derechos humanos de las mujeres mediante el fortalecimiento de la voz colectiva, el impacto y la influencia de las/os activistas, organizaciones y movimientos por los derechos de las mujeres de todo el mundo.

Más información sobre AWID

Obiageli “Oby” Nwankwo

Con una carrera jurídica que abarcó más de 30 años, Oby era conocida en toda África y en el mundo como una defensora de la justicia de género y los derechos humanos.

Fundó y fue Directora Ejecutiva del Civil Resource Development and Documentation Centre (CIRDDOC), una ONG nigeriana que patrocina capacitaciones y actividades de creación de redes para miembrxs de la sociedad civil, parlamentarixs y otrxs actores clave, para promover los derechos humanos, la buena gobernanza y el acceso a la justicia y el estado de derecho.

Oby es afectuosamente recordada por lxs activistas de Nigeria como una «extraordinaria activista que mostraba energía y pasión por la lucha por la igualdad de género y la justicia de género en Nigeria y en toda África».

 


 

Obiageli “Oby” Nwankwo, Nigeria

Cláusula de exención de responsabilidad: Comunicaciones con el equipo de AWID

Si has recibido correos electrónicos de integrantes del equipo de AWID, nos gustaría que tengas presente lo siguiente:

  • La información contenida en esta comunicación es confidencial y está destinada exclusivamente la persona que lo recibe.

  • Esta comunicación podría contener información que es propiedad de la Asociación para los Derechos de las Mujeres y el Desarrollo (AWID, por sus siglas en inglés). Esta información no puede reproducirse ni diseminarse  ni parcialmente ni  en su totalidad sin el consentimiento escrito de AWID.

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  • AWID no está actuando en calidad de asesora de ningún acuerdo que pueda surgir de este documento, y esta comunicación no constituye una recomendación, guía o propuesta para elaborar un acuerdo.

  • AWID no garantiza o asegura los resultados esperados de cualquier acuerdo. Esta comunicación puede contener puntos de vista y opiniones que pueden no corresponderse con aquellos de AWID.

  • No tendrá derecho a utilizar la información contenida en esta comunicación con fines de llegar a cualquier tipo de propuesta de acuerdo u otro. 

Escribí un artículo sobre un asunto relacionado con los derechos de las mujeres y el desarrollo. ¿Cómo puedo compartirlo con la membresía de AWID?

Sue Hoya Sellars

Sue fue artista, activista y maestra y nació en 1936 en Maryland, Estados Unidos.

Creó arte para mujeres y sobre mujeres. Como lesbiana feminista, y durante un tiempo también separatista, se dedicó a la creación de espacios sólo para mujeres. En 1976 compró tierras que todavía son conservadas por mujeres que van temporariamente a hacer arte. Sue mantuvo una apasionada posición en la protección de las mujeres y las niñas.

Con su innovador enfoque futurista, clásico y antropológico, llenaba cada habitación en la que entraba con su intelecto, su excentricidad auténtica, su ingenio implacable y su humor. Sus ideas acerca de la conciencia y la creatividad siguen inspirando a mucha gente.


 

Sue Hoya Sellars, USA

Nicole Barakat

nicole barakat -verge exhibition april 2018
“We transcend time and place” [«Trascendemos el tiempo y el lugar»], papel recuperado cortado a mano (2017)
nicole barakat -verge exhibition april 2018
“We will remember who we are and we will persist” [«Recordaremos quiénes somos y persistiremos»], lamé cortado a mano bordado en algodón sobre seda de lana (2018)
nicole barakat -verge exhibition april 2018
“We will return home” [«Regresaremos a casa»], lamé cortado a mano bordado en seda sobre terciopelo de algodón (2018)
verge march 18 - document photography
“We will heal in the now” [«Sanaremos en el ahora»], seda cortada a mano, lana, lamé, algodón, impresión digital directa de satén sobre tela de lino (2018)

somos infinitxs 

Una exposición de Nicole Barakat que encarna su reconexión con los objetos de la diáspora de sus tierras ancestrales en la región del Sudoeste Asiático y África del Norte (SWANA, por sus siglas en inglés).
 
Barakat presenta una colección de obras textiles como manifestaciones de su práctica de conectarse con los objetos desplazados, y a menudo robados, que son exhibidos en colecciones de museos occidentales que incluyen  el Museo del Louvre de París, el Museo Británico de Londres y el Nicholson Museum de Sydney.
 
Para burlar a los guardianes y fisurar las vitrinas que retienen estos objetos ancestrales, Barakat recupera formas de conocimiento precoloniales, no lineales y receptivas que son, a menudo, devaluadas y desestimadas por las instituciones coloniales y patriarcales, utilizando la adivinación con la borra del  café, el trabajo con los  sueños, la escucha intuitiva y las conversaciones con los objetos mismos (fuente).

Sobre Nicole Barakat

Nicole Barakat portrait
Nicole Barakat es una artista femme queer de SWANA, que nació y vive en las tierras de Gadigal (llamadas Sydney) en Australia. Trabaja con procesos intuitivos y de escucha profunda, con la intención de transformar las condiciones de la vida cotidiana. Su obra se desarrolla a través de métodos artísticos no convencionales, creando objetos intrincados que plasman el amor y la paciencia característicos de las prácticas textiles tradicionales.
 
Sus trabajos incluyen dibujos en papel y en tela cortados y cosidos a mano, esculturas realizadas con su propio cabello, tela y materiales vegetales, así como obras en vivo en las que utiliza su voz como material.
 
La práctica creativa de Nicole está arraigada en el re-cuerdo y la re-colección de sus conocimientos ancestrales, incluyendo la adivinación con la borra del café y, más recientemente, el trabajo con esencias de plantas y flores para el cuidado y la sanación comunitaria.

Nicole’s creative practice is rooted in re-membering and re-gathering her ancestral knowing, including coffee divination and more recently working with plants and flower essences for community care and healing. 

Avril 2015: tienen lugar las audiencias interactivas con empresarios y sociedad civil

  • El 8 y 9 de abril de 2015, en la sede de la ONU en Nueva York se realizaron audiencias interactivas oficiosas con el sector empresarial y la sociedad civil, respectivamente.
  • Las organizaciones por los derechos de las mujeres y otras organizaciones de la sociedad civil (OSC) plantearon sus preocupaciones acerca de la participación limitada de los Estados Miembros durante las audiencias con las OSC, por lo cual el CSO Coordinating Group [Grupo Coordinador de las OSC, ACG en inglés] envió una carta a los facilitadores sobre este asunto.
  • La segunda sesión redactora del Documento Final de la Conferencia de Adís Abeba tuvo lugar del 13 al 17 de abril de 2015 en la sede de la ONU. Sus discusiones tuvieron como base el Borrador Cero.
  • En las diferentes sesiones oficiales y eventos paralelos, el WWG presentó recomendaciones sobre las áreas temáticas de la FpD a los Estados Miembros. Algunas de las principales preocupaciones de las mujeres giraban en torno al hecho de que el Borrador Cero no ponía suficiente énfasis en los impactos enormes y negativos de la crisis financiera producto de la inestabilidad en los sistemas financieros internacionales sobre el desarrollo, la igualdad y los derechos humanos, particularmente los derechos de las mujeres.

Peni Moore

Peni fue una filósofa feminista radical, poeta, escritora, dramaturga y compositora.

Como primera coordinadora del movimiento por los derechos de las mujeres de Fiji, dejó un legado atravesado por su profundo compromiso con los derechos humanos de las mujeres, la justicia y la paz. La dedicación de Peni a la justicia social, económica y ecológica y su sobresaliente trabajo le valieron el respeto local e internacional. Fue una de las primeras participantes de los movimientos feministas hegemónicos en Fiji en trabajar junto a las personas LGBTQI como una verdadera aliada y brindó asistencia práctica durante la creación del movimiento de trabajadorxs sexuales.

Sus colegas la describen como una persona formidable y una líder con visión para el cambio. Inspiró a muchxs con su creatividad y coraje. Su trabajo significó una plataforma para que las personas sean escuchadas, adquieran nuevas habilidades y abran nuevos caminos tanto personales como comunitarios.


 

Peni Moore, Fiji

Encarnar un placer consciente del trauma

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Tshegofatso Senne Portrait

Tshegofatso Senne es unx feminista queer negrx con una enfermedad crónica. Buena parte parte de su trabajo se inscribe en el placer, la comunidad y los sueños, para el que se nutre del abolicionismo somático y la discapacidad, la sanación y las justicias transformadoras. Escribiendo, investigando y expresándose sobre cuestiones concernientes al feminismo, la comunidad, la justicia sexual y reproductiva, el consentimiento, la cultura de la violación y la justicia, Tshegofatso ha adquirido ocho años de experiencia teorizando sobre la intersección de estos tópicos con el placer. Tiene su propia actividad comercial, Thembekile Stationery, y la plataforma comunitaria Hedone, un espacio de reunión para analizar y comprender el poder de la toma de conciencia del trauma y el placer en la vida cotidiana. Tshegofatso trabaja con jóvenes de todo el continente, organiza talleres, presta asesoramiento en cuestiones de placer y liberación, y usa la creatividad y la narración como soluciones fractales a las injusticias sociales. 

Cover for EMBODYING TRAUMA-INFORMED PLEASURE

El cuerpo. El hogar más permanente que tenemos. 

En el cuerpo, no en el cerebro pensante, es donde experimentamos la mayoría de nuestro dolor, placer y alegría y donde procesamos la mayoría de lo que nos pasa. Es también donde realizamos la mayor parte de nuestra sanación, incluyendo nuestra sanación emocional y psicológica. Y es donde experimentamos la resiliencia y una sensación de fluidez. 

Estas palabras, escritas por Resmaa Menakem en su libro My Grandmother’s Hands [Las manos de mi abuela], se han quedado conmigo.

El cuerpo alberga nuestras experiencias. Nuestras memorias. Nuestra resiliencia. Y como ha escrito Menakem, el cuerpo también alberga nuestros traumas. Responde con mecanismos de protección espontáneos para detener o evitar más daños. El poder del cuerpo. El trauma no es el evento mismo; es cómo responden nuestros cuerpos a los eventos que sentimos como peligrosos. A menudo queda atravesado en el cuerpo, hasta que lo abordamos. No se puede convencer a nuestro cuerpo de que no responda, simplemente lo hace. 

Utilizando Digital Superpower, la aplicación de Ling Tan, fui registrando cómo se sentía mi cuerpo mientras recorría diferentes partes de mi ciudad, Johannesburgo, Sudáfrica. La aplicación es una plataforma guiada por gestos que te permite registrar tus percepciones mientras te mueves a través de diferentes lugares, cargando y grabando los datos. Yo la usé para registrar mis síntomas psicosomáticos (reacciones físicas conectadas a una causa mental). Podían ser flashbacks. Ataques de pánico. Opresión en el pecho. Un ritmo cardíaco rápido. Dolores de cabeza tensionales. Dolor muscular. Insomnio. Dificultad para respirar. Registré estos síntomas mientras caminaba y recorría distintas partes de Johannesburgo. Y me pregunté.
 

¿Dónde podemos estar segurxs? ¿Podemos estar segurxs?

Las respuestas psicosomáticas pueden ser causadas por una cantidad de cosas, y algunas no son tan severas como otras. Después de vivir cualquier tipo de trauma, puedes sentir un intenso malestar en eventos o situaciones parecidas. Registré mis sensaciones, ordenadas en una escala del 1 al 5, en la que el 1 representaba las instancias en las que apenas sentí alguno de estos síntomas – me sentía más cómoda que en guardia o nerviosa, mi respiración y mi ritmo cardíaco eran estables, no estaba mirando sobre mi hombro – y el 5 era lo opuesto: los síntomas me tenían cerca del ataque de pánico. 

Como persona negra. Como persona queer. Como persona de género queer que puede ser percibida como mujer, dependiendo de cuál sea mi expresión de género ese día. 

Me pregunté.
¿Dónde podemos estar segurxs?

Incluso en barrios que se podrían considerar «seguros», me he sentido constantemente en pánico. Mirando alrededor mío para asegurarme de que no me estaban siguiendo, acomodándome la camiseta de manera que no se me noten tanto los pechos, mirando alrededor para asegurarme de encontrar numerosas rutas para salir del lugar en el que estaba si me sintiera en peligro. Un camino vacío provoca ansiedad. Uno atestado también lo hace. Estar en un Uber también. Caminar en un camino público también. Estar en mi departamento también. Y también lo hace recibir una entrega a domicilio en la puerta de entrada del edificio. 

¿Podemos estar segurxs?

Pumla Dineo Gqola habla de la fábrica de miedo femenino. Puede o no resultarte familiar, pero si eres alguien socializadx como mujer, conocerás bien esta sensación. La sensación que te hace planificar cada paso que das, ya sea que vayas a trabajar, a la escuela, o simplemente a hacer algún trámite. La sensación de que tienes que fijarte cómo te vistes, cómo actúas, cómo hablas tanto en público como en privado. La sensación en la boca del estómago si tienes que viajar de noche, recibir una entrega a domicilio o tratar con cualquier persona que sigue socializado como hombre cis. Acosadx en la calle, siempre con la amenaza de la violencia. Nuestra existencia en cualquier espacio viene con un miedo innato.

El miedo es tanto un fenómeno individual como sociopolítico. A nivel individual, el miedo puede presentarse como parte de un sistema de alarma saludable y bien desarrollado [...] Cuando pensamos en el miedo, es importante sostener ideas tanto acerca de la experiencia emocional individual como de las maneras políticas en las cuales el miedo ha sido utilizado para el control en diferentes épocas. 
- Pumla Dineo Gqola, en su libro Rape: A South African Nightmare [La violación, una pesadilla sudafricana]

Las mujeres, femmes y queers sudafricanxs sabemos que cada paso que damos afuera – pasos para hacer las cosas cotidianas: caminar a las tiendas, un taxi al trabajo, un Uber desde una fiesta – todos estos actos son una negociación con la violencia. Este miedo es parte del trauma. Para soportar el trauma que cargamos en nuestros cuerpos, desarrollamos respuestas para detectar el peligro: mirar las respuestas emocionales de aquellxs a nuestro alrededor, leer buscando la «simpatía». Estamos constantemente en guardia. 

Día tras día. Año tras año. Vida tras vida. Generación tras generación.

Acerca del desafío adicional de este sistema de defensa aprendido, Bessel Van Der Kolk, autor de The Body Keeps Score [El cuerpo lleva la cuenta], dijo: 

Es que perturba esta capacidad de leer a otrxs con precisión, dejando a lx sobreviviente de trauma menos capaz de detectar el peligro o más proclive a percibir erróneamente peligro donde no lo hay. Insume una tremenda cantidad de energía seguir funcionando mientras se carga con la memoria del terror y la vergüenza de la absoluta debilidad y vulnerabilidad. 

Como ha dicho Resmaa Menakem, el trauma está en todo. Se infiltra en el aire que respiramos, el agua que tomamos, los alimentos que comemos. Está en el sistema que nos gobierna, en la institución que nos enseña y que también nos trauma y dentro de los contratos sociales que acordamos con lxs demás. Lo que es más importante, lo llevamos con nosotrxs a todos lados a donde vamos, en nuestros cuerpos, mientras nos agota y erosiona nuestra salud y felicidad. Llevamos esa verdad en nuestros cuerpos. Lo hemos hecho durante generaciones. 

Así que, mientras camino por mi ciudad, ya sea en un área que es considerada «segura» o no, llevo los traumas de generaciones cuyas respuestas están integradas a mi cuerpo. Mi corazón palpita, se hace difícil respirar, mi pecho se tensa, porque mi cuerpo siente como si el trauma estuviera sucediendo en ese mismo momento. Vivo en hiper vigilancia. Hasta el punto en el que unx está demasiado en guardia como para poder disfrutar plenamente su vida, o demasiado adormecidx para absorber nuevas experiencias. 

Para comenzar a sanar, debemos reconocer estas verdades.

Estas verdades que viven en nuestros cuerpos.

Este trauma es lo que nos impide a muchxs vivir las vidas que queremos. Pregunta a cualquier femme o persona queer cómo es para ellxs la seguridad y seguramente te darán ejemplos de tareas simples: ser capaz de simplemente vivir vidas alegres, sin la amenaza constante de la violencia. 

Las sensaciones de seguridad, de comodidad y de facilidad, son espaciales. Cuando encarnamos nuestro trauma, afecta las formas en las que percibimos nuestra propia seguridad, afecta las maneras en las que interactuamos con el mundo y altera las maneras en las que somos capaces de experimentar y encarnar cualquier cosa placentera y alegre. 

Tenemos que rehusarnos a esta pesada responsabilidad y luchar por un mundo seguro para todxs. Caminando heridxs, como estamos muchxs, somos luchadorxs. El patriarcado puede aterrorizarnos y brutalizarnos, pero no abandonaremos la lucha. Cada vez que salimos a la calle, desafiando el miedo de maneras espectaculares y aparentemente insignificantes, nos defendemos y hablamos en nuestro propio nombre.
- Pumla Dineo Gqola, en su libro Rape: A South African Nightmare [Violación, una pesadilla sudafricana]

¿Dónde podemos estar segurxs? ¿Cómo comenzamos a defendernos, no solo en el sentido físico, sino en sentido emocional, psicológico y espiritual?

«El trauma nos convierte a todxs en armas», dijo adrienne maree brown en una entrevista realizada por Justin Scott Campbell. Y su obra, Pleasure Activism [Activismo del placer], nos ofrece numerosas metodologías para sanar ese trauma y afianzarnos en la comprensión de que la sanación, la justicia y la liberación también pueden ser experiencias placenteras. Especialmente quienes estamos más marginadxs, quienes puede que hayamos sido criadxs para equiparar el sufrimiento con «El trabajo». El trabajo que nos hemos tomado tantxs como activistas, constructorxs de comunidades, aquellxs que atienden a lxs más marginadxs, El trabajo que luchamos por hacer, quemándonos y raramente cuidando nuestras mentes y cuerpos. La alternativa es hacernos más conscientes de nuestro trauma, capaces de identificar nuestras propias necesidades y encarnar eso profundamente. Ese encarnar significa simplemente que somos más capaces de experimentar el mundo a través de los sentidos y las sensaciones en nuestros cuerpos, reconociendo lo que nos dicen, en vez de suprimir e ignorar la información que nos están comunicando. 

Estar en conversación constante con nuestro cuerpo vivo y sostener intencionalmente esas conversaciones nos conecta más profundamente con lo encarnado, nos permite hacer tangibles las emociones que sentimos cuando interactuamos con el mundo, amigarnos con nuestros cuerpos y entender todo lo que están tratando de enseñarnos. Cuando entendemos que el trauma y el encarnar están acoplados, podemos comenzar la sanación y acceder al placer más integralmente, saludablemente, y en nuestras vidas cotidianas sin vergüenza ni culpa. Podemos comenzar a acceder al placer como una herramienta para el cambio individual y social, aprovechando el poder de lo erótico, como lo describió Audre Lorde. Un poder que nos permite compartir la alegría a la que accedemos y que vivimos, ampliando nuestra capacidad para la felicidad y entendiendo que somos merecedorxs de ello, incluso con nuestro trauma. 

Aprovechar el placer y la encarnación de lo erótico nos da la amplitud de estar deliberadamente vivxs, sintiéndonos afianzadxs y estables y entendiendo nuestros sistemas nerviosos. Nos permite entender y descargarnos del equipaje generacional que hemos estado acarreando sin darnos cuenta; podemos tener el poder que nos da el conocimiento de que incluso tan traumatizadxs como estamos, tan traumatizadxs como podríamos estar en el futuro, aún somos merecedorx de vidas placenteras y alegres, que podemos compartir ese poder con nuestra gente. Es el aspecto comunitario lo que está faltando en la forma en que nos cuidamos; el autocuidado no puede existir sin cuidado comunitario. Somos capaces de sentir una confianza, seguridad y poder internos más profundos en nosotrxs mismxs, especialmente de cara a traumas futuros que van a ser disparadores, sabiendo cómo tranquilizarnos y estabilizarnos. Todo este entendimiento nos lleva a un poder interior más profundo que tiene recursos para enfrentar cualquier desafío que surja en nuestro camino. 

Como somos lxs que vivimos con profundos traumas generacionales, nos hemos vuelto desconfiadxs y quizás pensemos que somos incapaces de contener y acceder al poder que tenemos. En «Los usos de lo erótico: lo erótico como poder», Lorde nos enseña que lo erótico nos ofrece una fuente de recarga, una forma de exigir lo mejor para nosotrxs y para nuestras vidas.

Porque lo erótico no es solo se trata de lo que hacemos, es una cuestión de con cuánta intensidad y plenitud podemos sentirnos mientras lo hacemos. Una vez que sabemos en qué medida somos capaces de sentir esa sensación de satisfacción y completitud, podemos observar cuál de nuestros diversos esfuerzos vitales nos lleva más cerca de esa plenitud. 

No digo nada de esto livianamente, sé que es más fácil decirlo que hacerlo. Sé que muchxs de nosotrxs estamos impedidxs de entender estas verdades, de internalizarlas o incluso de sanarlas. La resistencia viene con momentos de inseguridad, pero no es imposible. Resistir las estructuras de poder que mantienen a salvo a lxs más poderosxs siempre pondrá en peligro a quienes fuimos empujadxs a los márgenes. Reconocer los traumas que has enfrentado es una recuperación de tus experiencias vividas, las que han pasado y las que vendrán; es la resistencia la que encarna el conocimiento de que somos merecedorxs de algo más que las migajas que estos sistemas nos han obligado a engullir. Es una resistencia que entiende que el placer es complicado por el trauma, pero que se puede acceder a él de formas arbitrarias y poderosas. Es una resistencia que reconoce que nuestro trauma es un recurso que nos conecta entre nosotrxs y que nos puede permitir mantenernos mutuamente a salvo. Es una resistencia que entiende que incluso con el placer y la alegría esto no es una utopía; aún causaremos y recibiremos daño, pero estaremos mejor equipadxs para sobrevivir y prosperar en una comunidad de cuidados diversos y amabilidad. Una resistencia que da paso a la sanación y la conexión con nuestro ser plenamente humanxs. 

Sanar nunca será un recorrido fácil y optimista, pero comienza con el reconocimiento de la posibilidad. Cuando la opresión nos hace creer que el placer no es algo a lo que todxs podamos tener igual acceso, una de las maneras en las que comenzamos a hacer el trabajo de reclamar nuestro ser pleno – nuestro ser completo y liberado – es reclamando nuestro acceso al placer. 

En su artículo en Pleasure Activism (con el cual ha contribuido), Leah Lakshmi Piepzna-Samarasinha ha dicho:

Sé que para la mayoría de la gente las palabras «cuidado» y «placer» ni siquiera pueden estar en la misma oración. Todxs estamos empapadxs en un odio capacitista hacia los cuerpos que tienen necesidades, y nos dan una opción realmente de mierda: o no tener necesidades para conseguir tener autonomía, dignidad y control sobre nuestra vida o admitir que necesitas cuidado y perder todo lo anterior.

¿Qué poder tiene esto? Entendemos nuestros traumas, de este modo, entendemos los de otrxs; encarnamos las sensaciones que experimentamos y vamos hacia ellas en vez de distraernos y evitarlas. Accedemos al placer de maneras que nos hacen querer compartir esa alegría con quienes son nuestra comunidad. Cuando tenemos conciencia del trauma, nos damos más lugar para experimentar todo esto y nos damos, a nosotrxs y a otrxs, el permiso para sanar. Imagina una comunidad en la cual todxs tienen acceso, recursos y tiempo para vivir vidas placenteras, en la forma que sea que quieran y merezcan; en la cual los traumas territoriales están mitigados porque las personas que los ocupan son conscientes del trauma y están llenas de cuidado tierno. ¿No es eso sanador? ¿No es eso trabajar los traumas generacionales? ¿No construye y sostiene eso futuros más sanos para todxs?

Es tiempo de que reconectemos con el conocimiento ancestral de que merecemos vivir vidas plenas. Necesitamos volver a estar en contacto con nuestro derecho natural a la alegría y a existir para nosotrxs. A sentir placer simplemente por el hecho de sentirlo. A no vivir vidas de terror. Suena radical, se siente radical. En un mundo donde hemos sido socializadxs y traumatizadxs para el entumecimiento, para el miedo, para sentirnos y seguir estando impotentes, para ser codiciosxs y vivir con temas estructurales que nos llevan a la enfermedad mental, qué regalo y qué maravilla es empezar a sentir, a estar en comunidad con quienes sienten, a ser sanamente interdependientes, a amarnos mutuamente. Sentir es radical. El placer es radical. Sanar es radical. 

Tienes permiso para sentir placer. Tienes permiso para bailar, crear, hacerte el amor a ti mismx y a otrxs, celebrar y cultivar la alegría. Te aliento a que lo hagas. Tienes permiso para sanar. No te lo guardes dentro, no intentes atravesar este momento solx. Tienes permiso para hacer el duelo. Y tienes permiso para vivir.
- adrienne maree brown, «You Have Permission» [Tienes permiso]

La encarnación somática nos permite explorar nuestro trauma, trabajarlo y establecer conexiones significativas con nosotrxs mismxs y con el colectivo. Hacer esto a lo largo del tiempo sostiene nuestra sanación; al igual que el trauma, la sanación no es un evento de una única vez. Esta sanación nos ayuda a avanzar hacia la liberación individual y colectiva. 

En «A Queer Politics of Pleasure» [Una política queer del placer], Andy Johson habla acerca de las formas en las que hacer que el placer sea queer nos ofrece fuentes de sanación, aceptación, liberación, juego, plenitud, desafío, subversión y libertad. ¡Qué amplio! Cuando encarnamos el placer en formas que son tan integrales, tan queer, somos capaces de reconocer la limitación. 

Hacer que el placer sea queer también nos plantea las preguntas que entrecruzan nuestros sueños con nuestras realidades de vida. 

¿Quién es libre o consideradx suficientemente valiosx para sentir placer? ¿Cuándo se tiene permitido sentir placer o satisfacción? ¿Con quién se puede sentir placer? ¿Qué clase de placer es accesible? ¿Qué nos limita para acceder a todo nuestro potencial erótico y de satisfacción? 
- Andy Johnson, «A Queer Politics of Pleasure» [Una política queer del placer]

Cuando nuestras prácticas de placer conscientes del trauma están basadas en el cuidado comunitario, comenzamos a responder algunas de estas preguntas. Comenzamos a entender el potencial liberador. Como activistas del placer, esta es la realidad en la que nos afirmamos. La realidad que dice: mi placer puede ser fractal, pero tiene el potencial de sanarme no solo a mí y a mi comunidad, sino a futuros linajes. 

Soy un sistema entero; somos sistemas enteros. No somos solo nuestros dolores, solo nuestros miedos ni solo nuestros pensamientos. Somos sistemas enteros preparados para el placer y podemos aprender cómo decir sí desde adentro. 
- Prentis Hemphill, entrevistadx por Shar Jossell

Hay un mundo de placer que nos permite comenzar a entendernos integralmente, de formas que nos dejen lugar para reconstruir las realidades que afirman que somos capaces y merecedorxs de placer cotidiano. El BDSM, uno de mis placeres más profundos, me permite dar un vistazo a estas realidades en las que puedo tanto sentir como sanar mi trauma, así como sentir innumerables oportunidades para decir sí desde adentro. Mientras que el trauma me mantiene estancada en un ciclo de luchar o huir, el bondage , el estar de rodillas, el impacto y el juego de asfixia me alientan a mantenerme en tierra y conectadx, reconectando con la reparación. El placer que es lúdico me permite sanar, identificar dónde está guardada en mi cuerpo la energía traumática y enfocarla ahí. Me permite expresar las sensaciones que siente mi cuerpo a través de gritos de dolor y de placer, expresar mi no sin miedo y deleitarme en el puto sí. Con un plan de seguridad, cuidado posterior y una comprensión profunda del trauma, lo retorcido ofrece un lugar para el placer y la sanación que es invaluable. 

Así que tanto si tu placer es cocinar una comida a tu gusto, tener sexo, pasar el día en la cama con tu gente, participar en colectivos de cuidado de personas con discapacidad, que alguien te escupa en la boca, ir a excursiones accesibles, tener citas tiernas, asistir a una fiesta bailable en línea, dedicar tiempo a tu jardín, ser ahogadx en un calabozo, espero que lleves el placer contigo donde sea que vayas. Espero que te sane a ti y a tu gente. 

Reconocer el poder de lo erótico en nuestras vidas puede darnos la energía para buscar un cambio genuino en nuestro mundo. 
- Audre Lorde, «Uses of the Erotic: The Erotic as Power» [Los usos de lo erótico: lo erótico como poder]


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Explorar Corporalidades Transnacionales

Esta edición en alianza con Kohl: una publicación para Body and Gender Research analizará soluciones, propuestas y realidades feministas para transformar nuestro mundo actual, nuestros cuerpos y nuestras sexualidades.

Explorar

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التجسيدات العابرة للحدود

نصدر النسخة هذه من المجلة بالشراكة مع «كحل: مجلة لأبحاث الجسد والجندر»، وسنستكشف عبرها الحلول والاقتراحات وأنواع الواقع النسوية لتغيير عالمنا الحالي وكذلك أجسادنا وجنسانياتنا.

استكشف المجلة

¿Cómo puedo financiar mi participación en el Foro de AWID? Muchxs activistas no podrán costearse el Foro: ¿AWID está haciendo algo para brindar asistencia?

Por favor consulta la página «Financiamiento» para obtener algunas ideas sobre cómo puedes financiar tu participación en el próximo Foro. Esto incluye el limitado apoyo que AWID podrá brindar.

Su’ad Al-Ali

Su’ad fue una firme defensora de los derechos de las mujeres y lxs niñxs y estuvo al frente de Al-Weed Al-Alaiami, una organización de derechos humanos iraquí.

Participó en las manifestaciones que tuvieron lugar en julio de 2018 en Basra y en varias otras ciudades iraquíes, en protesta contra el desempleo y en demanda de trabajo y servicios públicos adecuados para la ciudadanía, y exigiendo también la eliminación de la corrupción generalizada.

Su’ad fue asesinada el 25 de septiembre de 2018, en el barrio de Al-Abbasiyah, en el centro de Basra. En un video del hecho, se veía a una persona que se le acercaba mientras ella se subía a su automóvil, le disparaba un tiro en la parte posterior de la cabeza y apuntaba el siguiente disparo a Hussain Hassan, su chofer, quien resultó herido en un hombro. Al-Ali tenía 46 años y era madre de cuatro hijxs.


 

Su'ad Al Ali, Iraq

Carta de amor a los movimientos feministas #5

Feministas sudanesas: «Una revolución dentro de la revolución»

«Mientras estaba en la primera línea de la protesta, fui sometida a violencia sexual, a lesiones físicas y a otras formas de violencia. Pero no me detendré hasta que logremos pleno gobierno civil en Sudán. Debemos impedir la militarización del Estado. Nuestros cuerpos no deben seguir siendo tratados como campos de batalla»

dijo Amal,1 una manifestante de 23 años.2 

Durante los últimos cuatro años, las mujeres lideraron la revolución en Sudán. Su liderazgo no fue solo callejero, sino que constituyó el poder que impulsó la resistencia constante en todos los niveles. Las mujeres y las jóvenes feministas se convirtieron en la conciencia alerta del movimiento de cambio y democratización sudanés. Desde la primera protesta del 13 de diciembre de 2018 contra el régimen anterior, en la ciudad de Aldmazein, en el área de conflicto del Nilo Azul, las jóvenes estudiantes fueron las voces que demandaron el fin de la dictadura de los militares y los Hermanos Musulmanes, que ya lleva treinta años en el poder.

Love letter to feminist movements from Your dramatically cloaked jungle nymph.

El movimiento feminista, liderado por mujeres de entre 16 y 35 años, ha entablado una revolución dentro de la revolución en Sudán durante los últimos cuatro años de lucha ininterrumpida. Las potentes voces de las jóvenes que ocupan espacios en las calles, las redes sociales, la sociedad civil y las organizaciones políticas se elevaron lo suficiente como para reconfigurar la opinión pública y desafiar las normas sociales. Por primera vez en la historia de Sudán, las discusiones sobre violencia sexual y de género y sobre los tabúes de la violencia doméstica y los procesos de toma de decisiones dominados por los hombres se convirtieron en debates generalizados. Los equipos de fútbol de mujeres designaron voceras ante los comités de resistencia, y los sindicatos profesionales liderados por mujeres son parte de la expresión de la nueva ola del movimiento feminista de Sudán. El logro más importante es que las jóvenes se identifican como feministas en forma orgullosa y pública, en un país regido por el fundamentalismo islámico durante tres décadas. Los jóvenes varones que apoyan el activismo feminista -y se identifican como feministas- son otra señal de progreso notable.

Bajo el actual régimen del golpe militar, las jóvenes que lideran estas iniciativas y los grupos de mujeres que trabajan en el territorio no pueden mencionarse aquí debido a varios problemas de seguridad. Pero su resiliencia, su fuerza y su valentía serán incluidas en los libros de historia. Las audaces jóvenes que encabezan la resistencia en las calles y detrás de las pantallas, y que trabajan en diferentes profesiones y áreas de activismo están dando forma al futuro de Sudán. Las jóvenes feministas de Sudán están creando nuevos espacios para que las narrativas y los discursos feministas reestructuren la distribución del poder a nivel político, económico y social.

A pesar de la inmensa violencia, del resurgimiento del islamismo fundamentalista, de la militarización y de la reducción de los espacios cívicos, las activistas feministas de Sudán se mantienen arraigadas en su sororidad. Siguen siendo una gran inspiración para los movimientos feministas de todo el mundo.

 

Nazik Awad


1 «Amal» es un seudónimo utilizado para proteger a la joven activista citada.
2 Desde 2018, Sudán vive en una revolución constante. Una nueva ola opositora arrancó a partir del golpe militar del 25 de octubre de 2021.

Cynthia Cockburn

Cynthia Cockburn fue una socióloga feminista, escritora, académica, fotógrafa y activista por la paz.

Estudió los aspectos relacionados con el género en la violencia y el conflicto e hizo importantes contribuciones al movimiento por la paz gracias a sus investigaciones sobre masculinidad y violencia, así como gracias a su activismo local e internacional.

Cynthia aportó un análisis feminista potente sobre la militarización y la guerra, y fue una de las académicas cuyos escritos y estudios demostraron claramente cómo la violencia de género desempeñaba un papel clave en la perpetuación de la guerra. Al trabajar en estrecha colaboración con activistas por la paz en distintos países en conflicto, sus conclusiones abarcaron diversos contextos, entre ellos: Irlanda del Norte, Bosnia y Herzegovina, Israel/Palestina, Corea del Sur, Japón, España y el Reino Unido. También logró incluir en sus investigaciones y escritos académicos una interpretación sobre cómo la violencia se experimenta como un continuo de tiempo y escala y cómo se percibe de forma muy diferente cuando se analiza desde la perspectiva de género.

En sus propias palabras: "El género nos ayuda a ver la continuidad, la conexión entre los casos de violencia".

Cynthia conectó su trabajo de investigación con el activismo que sostuvo a nivel local e internacional con los movimientos por la desmilitarización, el desarme y la paz. Ayudó a iniciar el campamento de paz de las mujeres de Greenham Common, que defendía el desarme nuclear universal en Gran Bretaña, y formó parte también de la creación del capítulo londinense de Women in Black [Mujeres de Negro]. A lo largo de las décadas, Cynthia organizó y participó en vigilias semanales locales y en el coro político Raised Voices [Elevar las Voces], para el que, además de cantar, escribió varias letras de canciones que forman parte de su repertorio.

Su activismo la llevó a apoyar también el trabajo de la Women’s International League for Peace and Freedom [Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad] (WILPF, por su siglas en inglés), el European Forum of Socialist Feminists [Foro Europeo de Feministas Socialistas] y Women Against Fundamentalism [Mujeres contra el Fundamentalismo].

"Cynthia arrojó claridad feminista, tejió comunidades feministas, cantó canciones de paz, escuchó, escuchó, escuchó, observó los pájaros - y detuvo el tráfico. Siempre estaré agradecida y en deuda con ella, la otra 'Cynthia'" - Cynthia Enloe.

Cynthia nació en julio de 1934 y falleció en septiembre de 2019, a la edad de 85 años.

Una estrategia, un mercado y nuevas voces: Las mujeres indígenas y los Foros AWID

Portada para Una estrategia, un mercado y nuevas voces: Las mujeres indígenas y los Foros AWID Historias

 

 

 

Esta historia es sobre la manera en que un grupo cada vez más diverso de feministas del Pacífico se organizaron a lo largo de los años para asistir a los Foros de AWID, y el modo en que ese proceso lxs transformó en forma personal, como organizaciones y como movimiento a través de lo que aprendieron, descubrieron y experimentaron. Ilustra la importancia de los Foros como espacio que permitió que una región que tiende a ser marginada o ignorada a nivel global pueda construir una presencia sólida en el movimiento feminista, que luego es replicada en otros espacios internacionales de derechos de las mujeres.

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En sus propias voces: mira la entrevista con María Manuela Sequeira & Mónica Alemán


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Fadila M.

Fadila M. fue una activista tribal soulaliyate de Azrú, en la región Ifrane de  Marruecos. Luchó contra una forma específica de discriminación territorial dirigida a  las mujeres tribales.

Como parte del Movimiento de Mujeres Soulaliyate por el Derecho a la Tierra, trabajó para reformar el marco legislativo relacionado con la administración de la propiedad comunitaria, a través de la adopción, en 2019, de tres proyectos de ley que garantizan la igualdad de mujeres y varones.

Según las leyes consuetudinarias vigentes, las mujeres no tenían derecho a beneficiarse de la tierra, en especial aquellas que eran solteras, viudas o divorciadas. En Marruecos, los derechos a las tierras colectivas eran transmitidos tradicionalmente entre los varones de la familia mayores de 16 años. Desde 2007, Fadila M. ha sido parte del movimiento de mujeres, la primera movilización nacional de base por los derechos a la tierra. Una de sus conquistas ha sido que, en 2012, las mujeres soulaliyate pudieron registrarse por primera vez en las listas de beneficiarixs, y recibir compensaciones relacionadas con la cesión de tierras. El movimiento también logró la enmienda del dahir (decreto del Rey de Marruecos) de 1919, para garantizar el derecho a la igualdad de las mujeres.

Fadila M. falleció el 27 de septiembre de 2018. Las circunstancias de su muerte no son claras. Participó en una marcha de protesta relacionada con el tema de las tierras colectivas y, si bien las autoridades informaron que su muerte fue accidental y que tuvo un paro cardíaco camino al hospital, la sección local de la Asociación de Derechos Humanos de Marruecos (AMDH) señaló que Fadila fue sofocada por un miembro de la fuerza policial utilizando una bandera marroquí. Su familia solicitó una investigación, pero los resultados de la autopsia no fueron dados a conocer.

Más información sobre el Movimiento de Mujeres Soulaliyate por el Derecho a la Tierra (en inglés)


Nota: Como no ninguna fotografía/imagen de Fadila M. disponible, la obra de arte (en lugar de un retrato) pretende representar por lo que luchó y trabajó: la tierra y los derechos a vivir y tener acceso a esa tierra y lo que crece en ella.

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Stacey Park Milbern

"No sé mucho sobre la espiritualidad o lo que sucede cuando morimos, pero mi vida de coreana crip queer me hace pensar que nuestros cuerpos terrenales son sólo una fracción de lo que somos, y no considerar a nuestros antepasadxs es quedarse con solo un atisbo de lo que somos". - Stacey Park Milbern 

Stacey Park Milbern fue una mujer autodefinida como queer, con discapacidad y de color, además de una pionera. Líder y organizadora respetada y de amplia trayectoria en el movimiento por los derechos y la justicia para las personas con discapacidad, también defendió los derechos de muchas otras comunidades, y no solo los de la suya propia. El activismo de Stacey tenía raíces poderosas en su experiencia personal con las intersecciones del género, la discapacidad, la sexualidad y la raza.

Stacey, junto con algunxs amigxs, co-creó el Club de Cultura de Justicia para la Discapacidad, un grupo dedicado a apoyar a varias comunidades, especialmente aquellas más vulnerables, que, entre otras cosas, está ayudando a las personas sin hogar a acceder a recursos durante la pandemia del COVID-19.

También fue coproductora de una campaña con mucho impacto para el documental de Netflix "Crip Camp", integrante de la junta directiva de la Fundación WITH, y dirigió organizaciones a nivel local, estatal y nacional. Stacey escribió además de manera hermosa y poderosa:

"Mis antepasadxs son personas forzosamente separadas de sus amores a causa de la guerra y el desplazamiento. Es gracias a ellxs que hoy conozco el poder de construir un hogar con lo que tienes, dondequiera que estés, con quien quiera que estés. Mis antepasadxs son queers que vivieron en el sur de América. Es gracias a ellxs que entiendo la importancia de las relaciones, del lugar y de vivir la vida al máximo, aunque sea peligroso. Todxs mis antepasadxs conocen el anhelo. El anhelo es a menudo nuestro lugar de conexión..." - Stacey Park Milbern

Stacey nació en Seúl, Corea, y creció en Carolina del Norte, para después continuar con su viaje en el área de la bahía de San Francisco. Stacey falleció por complicaciones de una cirugía en su cumpleaños número 33, el 19 de mayo de 2020.


Para leer un ensayo de Stacey Park Milbern (en inglés)
Para escuchar una entrevista con Stacey Park Milbern (en inglés)
#StaceyTaughtUs: Record your story for the Disability Visibility Project (en inglés)

Tributos:

"Ella fue, como mucha gente diría, una líder nata. En cierta medida, ella lo abarcó todo. ¿Sabes? Ella supo liderar desde la primera línea, desde el medio y también desde atrás.  Era capaz de hacer todo eso de alguna manera." - Andraéa LaVant, activista por los derechos de las personas con discapacidad.

"Qué golpe perder a Stacey cuando nuestras comunidades necesitan de su liderazgo más que nunca, y en un momento en que su fuerza, perspicacia y agallas estaban recibiendo un mayor reconocimiento, más allá de los círculos de las personas con discapacidad, y le ofrecían una plataforma mayor para avanzar con el trabajo de su vida... No tendremos la suerte de aprender hasta dónde su carismático liderazgo nos habría llevado. Pero, sin ningún tipo de dudas: Lo que Stacey nos dio, en un tiempo relativamente corto, continuará beneficiando a otrxs en los próximos años". - Fondo de Educación y Defensa de los Derechos de las Personas con Discapacidad (DREDF, por sus siglas en inglés).